LG Energy Solution y General Motors (GM) han llegado a un acuerdo de $150 millones para resolver demandas colectivas relacionadas con defectos en las baterías de vehículos eléctricos. Este acuerdo tiene su origen en problemas con baterías suministradas por LG, que dieron lugar a retiradas del mercado y a importantes repercusiones financieras para GM.

El acuerdo pretende compensar los costes ocasionados por las baterías defectuosas, que afectaron al Chevrolet Bolt EV y a otros modelos. Ambas empresas se han comprometido a abordar la causa raíz de los defectos y a garantizar unos estándares de calidad más elevados en la futura producción de baterías.

Esta resolución subraya la importancia de la responsabilidad y la colaboración entre los fabricantes de automóviles y sus proveedores en un mercado en rápida evolución como el de los vehículos eléctricos. Al abordar estos retos de frente, LG y GM pretenden restaurar la confianza de los consumidores y reforzar su dedicación al avance de la movilidad eléctrica.

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